La Paz dejó de ser la mítica ciudad imbatible en la que la selección no perdía desde 1950. Bolivia ocupó el último lugar del grupo con solo dos puntos. La vieja ilusión de ser sede de un Campeonato Sudamericano frustrada en 1930 por la suspensión temporal de esos torneos cuando Bolivia había sido designada (y había construido el estadio Hernando Siles precisamente para inaugurarlo en el Sudamericano), se hizo por fin realidad en el Congreso de la Conmebol en Barranquilla que en mayo de 1961 aprobó a Bolivia como sede del XXI Torneo Continental (que contando los extraordinarios era el XXVIII).